viernes, 29 de agosto de 2008

Al fucking dios


Tengo el corazón a media asta. No soporto las mariposas negras revoloteando alrededor. La incertidumbre aterra a los que no tenemos a qué aferrarnos. Me han dicho que rece, que le pida a Dios. Pero no tengo un dios que me escuche. El católico me quema en su hoguera todos los días, para llegar al evangélico me falta un alto parlante y ponerme al día con el diezmo. Temo a la ira de Yavhé por lo que prefiero no molestarlo. No se dónde queda La Meca, ni me gusta ayunar, y me han dicho que Alá no escucha a las feministas.Tengo mala memoria, así que nunca podré ser politeísta. Y los dioses mayas, apenas los conozco. Soy una mujer sin fe, estoy rota. Mi esperanza ha sido ametrallada un millón de veces en cada titular del periódico, ante la injusticia en los ojos del anciano del semáforo, en la carga de leña diaria de los niños, en el precio de salvar una vida en este país.Perdí la inocencia el día en que empezaron a marcharse los amigos a ese lugar donde todos terminaremos, ahí donde no importarán las religiones, ni el color de nuestros dioses, donde no entra el celular, ni los mensajitos, ni las lágrimas tardías. No encuentro un dios que me escuche. No hay palabras que me consuelen, ni rosarios a los qué aferrarme. La realidad me aplasta con su pezuña sucia. No tengo a dónde salir corriendo. Necesito un código, un lenguaje que llegue al Ser que ordena este caos. Las palabras no me alcanzan. Estoy congelada en la risa histérica del miedo, con un coma en alma. La alegría se me escurre como la vida de mi amigo. Si bastara la magia de los buenos momentos, si contara el amor sembrado, la fuerza inmensa de la amistad y el cariño, si los milagros existieran y los dioses escucharan los buenos deseos, esta sería una oración.

(A mi gran amigo Calaca, el mas grande de los grandes, Lucha Libre publicada el 27 de agosto del 2008, mismo día que se fué)

martes, 26 de agosto de 2008

Respuesta para Lucía Escobar


Aquí reproduzco la carta de la señora María Concepción Pineda Longo de Willemsen, dirigida hacía mi persona:

Sorprendida, con mucha indignación y tristeza, me refiero a su artículo del 13 de agosto, titulado “Laico”. Comienzo por el final de su desafortunada frase: “No metan sus rosarios en nuestros ovarios”. Aprenda a respetar otras creencias, en este caso Nuestro Santo Rosario, que para los católicos nos sirve como poderosa y eficaz oración.José Alejandro Arévalo, persona de mi conocimiento y quien ha demostrado ser sin tacha, contribuyó con el Libro de la Vida, al condenar el aborto. No veo falta en esto, ya que quien aborta, mata y eso, es delito. Respeto su opinión, pero enfatizo mi rechazo por haber mancillado nuestras devociones.

No robarás

Es uno de los siete pecados capitales, es un mandamiento de la Biblia, es una ley en todos los países y comunidades del mundo. No robar. No quitarle al otro lo que le pertenece. Pero ¿quién cumple esta ley de convivencia en Guatemala? Empecemos con que este país fue levantando por el robo sistemático de tierra a los indígenas. Gobiernos de todos los tiempos, amparados en leyes, decretos y en fuerza bruta, se han dedicado los últimos siglos a saquear todo el patrimonio de los descendientes de los mayas. Aún no han terminado de hacerlo. Si antes fue con ayuda de políticos como Justo Rufino Barrios que hacía leyes a la medida para expropiar la tierra a las comunidades y “promover” la industria, hoy la situación es sumamente parecida. Veamos a la empresa de explotación minera Montana Exploradora y su lucha por comprar Sipacapa y extraer metales preciosos, los ha llevado a situaciones límite. Hubo gente secuestrada, torturada, amedrentada. Lo mismo sucede en San Juan Sacatepéquez, donde los hombres y mujeres acostumbrados a sembrar rosas quieren ser obligados a aceptar que Cementos “Progreso” ponga una fábrica en las áreas verdes. Por eso son pobres, dicen algunos. Que porque no aceptan el progreso, dicen otros. Pero es que la gente no es tonta, la gente sabe lo que es un robo. Somos un pueblo al que todos nos roban. Veamos los mismos diputados, encargados de velar por nuestros bienes, subastan el dinero del pueblo. No digamos las municipalidades y los alcaldes que piden comisiones por hacer su trabajo. Nos roban hasta los policías, los empresarios, las telefónicas, los ministros, los sacerdotes desde el púlpito. Pareciera que en Guatemala nadie conoce los mandamientos, nadie sabe de leyes ni de pecados capitales. Somos como una gran selva, donde la ley del más macizo y más fuerte es la que se sigue. Y todos quieren aprovecharse, llevar agua para su molino, aunque esto signifique despojar a los más necesitados. Pero yo creo en la justicia, en el karma, creo en la rueda del destino. Y tengo el convencimiento de que el dinero no da la felicidad. Sólo tener el alma limpia, la conciencia tranquila nos dará la paz.NO ROBE.

(Lucha Diaria publicada el martes 26 de agosto en elQuetzalteco)

miércoles, 20 de agosto de 2008

La niña x


No es un fenómeno atmosférico, tampoco es la niña de mis ojos. Menos, aquella que se murió de amor; su destino no es nada romántico. Tendrá unos 10 años, quizá 12 mal nutridos. Nuestras vidas se cruzaron sólo un momento. Compartimos el asiento en la camioneta, diez minutos de trayecto en bajada. La niña me mira con asombro: es como un cervatillo asustado, lejos de su madre, dos filas adelante. Habla sólo kaqchikel, despacio y callado. Su pelo negro y largo, amarrado con una cola de dos bolas; su cuerpo menudo, frágil, lleno de temblores y miedo, envuelto en un güipil descolorido. De mochila lleva un sute con un diminuto bebé de carne y hueso, pegado a su cuerpo. Imaginemos que no es su hijo, que es sólo su hermanito. Pero no podemos asegurarlo. Para el efecto, da igual, ella es la responsable.Percibo el inmenso amor que la niña tiene hacia esa personita, la manera suave con que lo protege de los cambios bruscos de velocidad que el piloto salvaje de esta máquina de la muerte nos infringe a todos. Veo sus manos pequeñas y fuertes, ásperas y amorosas, ágiles para detenerse del tubo del asiento en equilibrio perfecto para no caer. Sus tobillos flacos y sus pies de caite plástico, aguantan sin rabia los machucones abusivos del cobrador. Los ojos de esa niña son como una pantalla de cine. En ellos se reflejan todos los sentimientos del mundo. Saltan de gozo cuando pasamos frente a la escuela y se oscurecen cuando frenamos ante el hospital. Brillan cuando comprueba que el bulto a su lado duerme, y se llenan de humo cuando un vendedor la avienta con su canasto. Llegamos al fin a su parada. De un brinco ya está de pie, baja corriendo antes que el salvaje arranque y la deja en el aire. Se va caminando despacio, pegadita al cuerpo de su madre, lejos de mi vida.

(La lucha libre publicada el miércoles 20 de agosto del 2008)

martes, 19 de agosto de 2008

Las tierras de Cantel

No me parece nada descabellada la idea de las autoridades indígenas de Cantel de recuperar para el pueblo a k’iche’ algunas tierras donde durante años funcionó la industria textil más pujante de Occidente. Sobre todo si tomamos en cuenta que este imperio comercial comenzó con un fusilamiento colectivo y la expropiación de muchas tierras comunales en tiempos del llamado Reformador, Justo Rufino Barrios. En el barrio Cementerio Antiguo todavía se ve una plaqueta que recuerda aquel 4 de septiembre de 1884, cuando fueron fusilados miembros de la corporación municipal y los vecinos que se habían opuesto a que se apoderaran de las tierras. El tiempo pasó, la fábrica se convirtió en un imperio textil que llegó a exportar telas a medio mundo y llenó de dinero a varias generaciones de familias oligarcas guatemaltecas, mientras las comunidades de los alrededores continuaban viviendo en la pobreza. Pero hoy, tras la quiebra y cierre de la fábrica y el despido de cientos de personas, nueve comunidades unidas en 138 organizaciones e integradas por unas 36 mil habitantes exigen que los terrenos donde se encuentra la Iglesia San Antonio, el Mercado San Antonio, un campo de futbol, el parqueo de fleteros y algunos nacimientos de agua pasen a ser administrados por la comunidad, ya que antes estas tierras eran de uso comunitario del pueblo indígena de Cantel. No dudo que el camino será difícil, ya que, a pesar que hoy en día existen varias leyes y convenios internacionales que apoyan los derechos consuetudinarios de los pueblos indígenas, siempre hay empresarios aprovechados y abogados mafiosos dispuestos a cualquiera con tal de seguir engordando sus cuentas de bancos en las Islas Caimán. Pero ahora también hay casos paradigmáticos donde alcaldías indígenas han recuperado sin conflictos ni sangre tierras que antes les pertenecían, como es el caso de Chichicastenango y el antiguo Edificio de Correos, que tras pláticas y negociaciones regresó a sus manos. Así que, ojalá que las autoridades de Cantel, los empresarios involucrados y el gobierno de Guatemala, apoyen para que este conflicto se resuelva de la mejor manera posible para beneficio de los indígenas del área.

(Lucha Diaria publicada el martes 19 de agosto del 2008 en el Quetzalteco)

sábado, 16 de agosto de 2008

Concierto, rifa y subasta para Carlos Schelsinger o Calaca

Bueno, los cuates no pierden tiempo y se están moviendo.
El sábado 23 de agosto a partir de las 18:00 horas habrá una fiesta de agradecimiento (porque va recuperandose poco a poco nuestro amigo Calaca) y recaudación de fondos (porque en ese proceso ufff, se gasta mucha plata).
Se consiguieron varias cajas de donación de cerveza y una herencia de botellas de una boda. Hay tarimas, bocinas, equipo de sonido, luces.
Y ya confirmaron:
Pancho Toralla (con algo de circo y malabarismo)
Los ex roometes del Calaca;
Michel Peraza y Giovani Pinzón (guitarrazos limpios)
también Germánico Barrios (La Tona) , Taz y posiblemente el Neco.
Pablo Robledo también se apunta con unas rolas.
Además rápido el Vj Sine (Julio Dávila) se apunto con pantalla y proyecciones.
¿ Y quizá algún o alguna Dj quiere también poner música?
Alguién dijo que iba a vender ceviches y hot dogs.
También estamos pensando en hacer una rifas y si hay gente que se apunta con donar cuadros, fotografías o esculturas pues bienvenidos. También hay un cuadro de Gonzales Goyri que necesita comprador... Cualquier ayuda es agradecida...
Esto se realizará en un gimnasio de escalada de montaña en Cuatro grados norte, (no me han pasado el Mapa) pero pronto lo haremos circular...

jueves, 14 de agosto de 2008

Sus rosarios en nuestros ovarios

(Justo en la marcha del 8 de marzo del 2007 con la Nacas, fomentando el uso de anticonceptivos que eviten otros problemas mayores)

Me enseñaron que Guatemala es un país laico. Busque en mi diccionario y dice bien claro así: Que no tenga órdenes clericales. Independiente de cualquier organización o confesión religiosa. Mi valioso RAE todavía agrega el siguiente ejemplo: Estado Laico, Educación Laica.

Me queda bien claro, el gobierno de este país no debe moverse, ni dirigirse, ni mucho menos dejarse influenciar por los mandatos de religión alguna. Ni aunque venga del Opus Dei o del mismismo Maximón.

Pero parece, que los señores congresistas les urge revisar esa parte de la Constitución. Habría que explicárselos con dibujitos. Más les valdría ponerse a recuperar el dinero que perdieron en lugar de estar viendo como juzgan a las mujeres. Sobretodo ese diputado Alejandro Arévalo quién pretende que se firme en el Congreso una payasada llamada "El Libro de la vida", una propuesta fundamentalista que tomando como bastión el aborto, pretende dar cátedra sobre lo que las mujeres debemos hacer con nuestro cuerpo, sin aportar soluciones a los problemas fundamentales que vivimos.

No entiendo cómo los diputados por un lado aprueban la Ley del Feminicidio y por el otro promueven conceptos retrógrados y moralistas. Confió en la inteligencia, la solidaridad de género y la integridad de las legisladoras del Congreso en que ni de broma, firmaran esa afrenta a las mujeres. Los diputados de izquierda, también ¡aguas! La discusión y las soluciones a la problemática del aborto, están muy lejos de los dogmas religiosos y las imposiciones morales.

Al señor Arévalo más le valdría usar esa energía y dinero en promover métodos de planificación familiar, en vez de estar señalando a los demás con su dedo inquisidor.

¿Cuántas veces habrá que decirlo?


No metan sus rosarios en nuestros ovarios.


(Lucha libre del miércoles 13 de agosto publicada en elPeriodico)

martes, 12 de agosto de 2008

Mas respeto y menos miedo

Se celebra en todo el mundo el Día Internacional de la Juventud. Guatemala es un país joven por excelencia. Más de la mitad de sus habitantes tienen menos de 30 años. Muchos de ellos no saben leer ni escribir, no tienen un trabajo digno, no conocen un oficio que los saque adelante. La educación básica en nuestro país está en manos de la iniciativa privada; pocas familias pueden enviar a sus hijos a estudiar, menos son los que llegan a la universidad.
Así, las posibilidades y oportunidades de los jóvenes se ven reducidas. Albañiles, agricultores, vendedores ambulantes es lo que les queda hacer a los hombres que no se largan a cruzar la frontera en busca de oportunidades. Mientras las mujeres sin estudio sólo pueden soñar con hacer labores domésticas toda su vida o encontrar trabajo temporal en maquilas que las explotan, la mayoría de veces.
Ni de las delicias del amor carnal pueden disfrutar los jóvenes libremente, pues el acceso a métodos de planificación familiar y de anticonceptivos son limitados en muchas regiones del país. El precio de un paquete de condones se escapa del presupuesto de la mayoría de jóvenes. No hablemos del precio de un motel.
Encima de esto, la criminalización de la juventud es un vicio en países como Guatemala. Policías, ex militares, guardias de seguridad privados, se dedican a matar a la juventud de las áreas llamadas rojas, acusándolos sin juicio de pertenecer a las pandillas juveniles. Se habla más de los delitos que cometen algunos menores de edad, que de los delitos que se cometen contra la mayoría de los infantes, adolescentes y jóvenes del país.
La situación en las comunidades indígena, garífuna y xinca, es todavía peor. Es desolador el ambiente que se les presenta a los que no tienen como idioma materno, el español.
Sin embargo, no somos un país viejo, tenemos la fuerza de la juventud a nuestro favor, la pasión y la entrega con la que se dedican a sus ideales podría ser dirigida a mover Guatemala, y hacerla evolucionar a un lugar justo para todos y todas.
Más respeto y menos miedo hacia los jóvenes, por favor.

(Lucha Diaria publicada el 12 de agosto del 2008 en el Quetzalteco.com)

martes, 5 de agosto de 2008

Un amigo está en cama



Estoy buscando sangre para mi amigo. Carlos Schlesinger, alias Calaca, se accidentó el lunes cuando iba en su moto por la ciudad de Guatemala. Me duele imaginarlo en el asfalto, con la lluvia ácida lavándole las heridas.
Para el piloto que lo envistió tengo un par de maldiciones que me abstengo de reproducir, porque confió en la justicia divina, en el karma por atropellar a un tipazo como el Calaca. Ahora se encuentra en el Hospital Roosvelt, donde lo tendrán que operar y enderezarle algunos huesos y costillas. Necesitarán donadores de sangre dispuestos a compartir un poco de vida con mi amigo. (Mejor si llegan antes de las diez de la mañana).
A su favor, diría que mi amigo es de lo que comparten la vida con todos, de esos tipos cabales, con un gran corazón que no puede ocultar, se le sale cuando ríe y llena el ambiente con sus brillantes ingenuidades. Es alguien que se sale del montón, que no pierde sensibilidad a medida que crece, ni que deja de soñar ni actuar por un mundo mejor. Por eso, cambió el carro por la moto.
No contamina tanto, gasta menos gasolina y ahorra tiempo, me dijo.
Carlos también es iniciador de un movimiento de "orinadores ecológicos". Algunos líos tuvimos por eso pero lo superamos, sólo fue de explicarle dónde quedaba mi huerto para que no lo incluyera en su proyecto.
Entre muchas, muchas cosas, al Calaca le debo la organización de una "Luchatón" que sirvió para reponer mi cámara de fotos, cuando me la robaron. Eso no es nada, comparado con el amor y cariño que me ha demostrado siempre. Por eso y mil cosas más, hoy busco sangre para mi amigo. Me urge que se recupere, que deje atrás este accidente y que retome esa vida limpia que lleva. Lo necesito para subir a la terraza del Teatro Nacional o escaparnos al lago a tripear un mundo mejor.
Lo necesito, y también Pedro Pablo, Fabiola, su familia y sus amigos.

Lucha Libre de elPeriodiodico miércoles 7 de agosto)

Cualquier ayuda o duda pueden llamar a Roberto (papá: 58189083) o Fabiola (esposa: 50538603)

Miedo


Los humanos somos animales pensantes, pero siempre animales. La mayoría de los sucesos que vivimos diariamente responden a instintos básicos que debemos satisfacer. Dicen por ahí, por ejemplo, que el amor es una excusa intelectual para satisfacer nuestro instinto de reproducción. Las románticas pues, a llorar. No digan que no se les explicó. Sin embargo, como no somos sólo animales, sino que también tenemos pensamientos que nos hacen superiores, podemos y debemos guiar nuestra vida a un destino menos animal. De todos esos impulsos profundos y oscuros se aprovechan muchos para manipularnos. Vemos así que la publicidad, por ejemplo, utiliza nuestros miedos más ancestrales para vendernos desde cremas para vernos bellas hasta pistolas para proteger a nuestras crías de los peligros del mundo moderno. El miedo, me parece, es uno de los motores que guía nuestro actuar político. El Partido Patriota, liderado por Pérez Molina, nos mostró en las elecciones pasadas cómo estuvo a punto de ganar la Presidencia, apelando nada más y nada menos que al miedo que tenemos a perder nuestras posesiones materiales ante un marero. Algo chistoso e increíble es que hace poco, en una encuesta, decía que el noventa por ciento de los guatemaltecos a lo que más temían en este mundo era a los mareros. Sin embargo, esa misma proporción de personas, nunca en su vida se habían topado de frente con un pandillero. ¿Miedo a lo desconocido? ¿Prejuicio infundado para ver enemigos donde no hay?Si nos ponemos serios y analíticos, vemos que hace más daño al país el robo de 82 millones del Congreso que el robo de una cartera de manos de algún tatuado. Sin embargo, la mayoría de guatemaltecos apoya la limpieza social y considera que matar ladrones a diestra y siniestra es bueno, pero no apoya, por ejemplo, una manifestación para reducir el número de diputados en el Congreso, y con ello disminuir el gasto público y aumentar el nivel de vida de los guatemaltecos. Apelo pues, al intelecto, al cerebro, al sentido analítico de los humanos para que intentemos ver más allá de lo que nos quieren vender, para que sepamos distinguir al enemigo verdadero del impuesto por la sociedad. No tenga miedo, piense.

(Lucha Diaria publicada por el Quetzalteco el martes 5 de agosto del 2008)

lunes, 4 de agosto de 2008

La angustia del poeta y su carta de estupefacientes

La Angustia que hace a los locos.
La Angustia que hace a los suicidas.
La Angustia que hace a los condenados.
La Angustia que la medicina no conoce.
La Angustia que vuestro doctor no entiende
La Angustia que corta el cordón umbilical de la vida.
La Angustia que quita la vida.