miércoles, 24 de septiembre de 2008

Faldas y polícias

Y vuelvo...

Mucho hay que comentar al respecto del nombramiento de Marlen Raquel Blanco al frente de la corrupta y cuestionable Policía Nacional Civil. Empezando con el trato que los medios dan al hecho de que sea mujer. ¿Cuál es la importancia del número de hijos de la directora? No recuerdo haber leído alguna nota sobre Sperisen donde se mencionara cómo conoció a su esposa. Así que es claro que el sexo influye en nuestra percepción de la autoridad. Largos son los estudios al respecto. Pero más allá de eso, es atinada la decisión de darle la oportunidad a una mujer para intentar enderezar el rumbo de la PNC. No será nada fácil porque el machismo en Guatemala es crónico, y entre los policías no es la excepción.Los numerosos escándalos que han empañado la Academia donde se forjan los futuros agentes, incluyen acoso sexual, violaciones, abortos en los baños del lugar y ningún despido, ni asomo de justicia para las aspirantes a policía que pasan por ese pequeño infierno. Lo peor es que cuando se gradúan y salen de allí, llegan a las comisarías a sufrir los mismos acosos de colegas y jefes.Así que Marlen Blanco no la tiene nada fácil. Aunque supongo que 22 años sobreviviendo de mujer policía, la habrán vuelto fuerte. Eso no la salva de tener que demostrar el doble que un hombre, que tiene la formula perfecta -llámela sensibilidad o agallas- para poner en su lugar a los poli machos. Sólo con los trapos sucios de la PNC tiene suficiente. Pero si los limpia con ganas, y si cuenta con todo el apoyo de las demás engranajes de la maquinaria de justicia, estoy segura que su trabajo repercutirá en el desempeño de los agentes afuera, hacia la sociedad. Y eso lo agradeceríamos todos...

(Lucha Libre del miércoles 22 de septiembre publicada en elPeriodico)

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo con la columnista. En centros de trabajo como la policia y otros impera un ridiculo machismo, al extremo que muchos se valorizan como hombres por el numero de mujeres que en el transcurso de su vida han embarazado y hacen alarde de sus hazanias en las platicas de cantina

Anónimo dijo...

A los profesionales "hombres" nunca les preguntan cómo atienden sus casas; cómo se las arreglan para atender trabajo, casa e hijos; cómo concilian vida familiar con esfera profesional; dejarán de tener hijos por dedicarse a los hijos. ¿Es ese un dilema propio de mujeres?. Tradicionalmente se da por hecho que ellos ya lo tienen resuelto. Y así, por los siglos de los siglos, el sexo impone la regla y la percepción.

Anónimo dijo...

Yo jamas he pensado - y jamas lo he escuchado decir a ninguno de mis amigos hombres - como balancear mi vida profesional con la familia.



Como bien lo dijo Rosina Calzi, el sexo impone la regla y la percepcion. A Eva le cayo la maldicion tras el pecado original de ser sumisa y estar sujeta al hombre (Libro de Genesis). Y asi se llenen de bilis o de rabia, las mujeres tienen que acatar esa orden divina. De Dios nadie se escapa.


Dennis Darido

Anónimo dijo...

Conozco a la Comisaria, y por primera vez en muchos años, creo que el cambio fue para bien. Ojalá se rodee de gente buena en toda la extensión de la palabra. Que así sea.

Patricia Cortez dijo...

Dennis:
ud ha de ser uno de esos padres que se terminan detestando: buenos proveedores pero hasta allí, ojalá que su dios le de el amor a sus hijos y que no le dé hijas, porque ellas si van a sufrir